El comercio ilegal amenaza a los grandes simios y otros primates
Bangkok, Tailandia.- Chimpancés, orangutanes, gorilas y bonobos - chimpancés pigmeos- están desapareciendo de su medio natural en cifras alarmantes, mientras propietarios privados pagan grandes cantidades de dólares por tener una mascota exótica y algunos zoológicos, parques de entretenimiento y circos rodantes de mala fama claman por primates contrabandeados para entretener a sus audiencias.
Se calcula que más de 22 mil grandes simios han sido vendidos ilegalmente en un período de siete años que terminó en 2011. Eso significa aproximadamente tres mil por año, dice el reporte de la ONU. Más de la mitad eran chimpancés.
"Estos grandes simios constituyen una parte importante de nuestra herencia natural. Sin embargo, al igual que todas las cosas de valor, los grandes simios son utilizados por el hombre para ganancias comerciales y el tráfico ilegal de las especies representa una amenaza a su existencia", dijo Henri Djombo, un ministro de gobierno de la República del Congo, citado en el informe.
El reporte del organismo internacional pinta un panorama terrible en la lucha para proteger una decreciente fauna y flora vulnerable de redes de la delincuencia organizada que a menudo tienen la ventaja.
Contrabandistas hábiles cazan los simios en su propio hábitat, que está concentrado en el centro y occidente de África, antes de transportarlos en aviones de carga privados y que utilizan pistas de aterrizaje pequeñas. Su destino es generalmente Medio Oriente y Asia.
En países como Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos y Líbano, los grandes simios con comprados para mostrarlos como piezas de exhibición en jardines y zoológicos privados.
En Asia, los animales son típicamente destinados a zoológicos públicos y parques de entretenimiento. China es un destino principal para gorilas y chimpancés. Tailandia y Camboya han registrado casos de orangutanes que son utilizados para entretenimiento en "torpes combates de boxeo", agrega el reporte.
Una laxa aplicación de la ley y la corrupción facilitan el contrabando de animales a través de ciudades africanas como Nairobi, Kenia; y Jartum, Sudán, que son centros de tráfico. Bangkok, la capital de Tailandia, es un centro importante de comercio de orangutanes.
Las condiciones del transporte suelen ser terribles. En febrero de 2005, las autoridades aduaneras en el aeropuerto de Nairobi decomisaron una caja grande procedente de Egipto.
La caja contenía seis chimpancés y cuatro monos, colocados en pequeños compartimientos. La caja fue rechazada en el aeropuerto de El Cairo, un centro importante del tráfico de especies orientadas al Medio Oriente, y se le regresó a Kenia. Un chimpancé murió de hambre y sed.
La demanda de carne de primate también se ha incrementado debido a la proliferación de las actividades de tala y minería en África. Hay matanza de primates adultos y jóvenes para consumo y los huérfanos son capturados y vendidos en el comercio de especies vivas. Los aldeanos también se llevan a los primates de las zonas rurales para venderlos en las ciudades.
Los humanos además traspasan y destruyen los hábitats naturales de los primates; les destruyen los bosques donde viven esos animales para construir infraestructura o con otros fines. Esta situación obliga a los primates a una mayor proximidad y al conflicto con la gente.
A veces, incluso, los animales son víctimas de las guerras.
Los arrestos son muy escasos debido principalmente a que las autoridades en África, de donde provienen la mayoría de los grandes simios, carecen de recursos para sus policías a fin de combatir la redes de cazadores ilegales.
La corrupción impregna a la autoridad y a veces algunos sectores de ella están implicados en el comercio ilegal de estos animales. De 2005 y 2011, sólo 27 arrestos tuvieron lugar en África y Asia.
La Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres regula el comercio de animales y plantas para garantizar su supervivencia. Según el acuerdo, es ilegal el comercio de grandes simios capturados en su hábitat. Sin embargo, los traficantes eluden la norma al declarar falsamente que los animales fueron criados en cautiverio.
El orangután es el único gran simio que se encuentra en Asia. Una de las subespecies, el orangután de Sumatra, se encuentra en peligro crítico debido a que su población se redujo 80% en los últimos 75 años.
La especie se encuentra en gran peligro debido al ritmo de despeje de tierras y destrucción de bosques para destinarlos a uso industrial o agrícola.
En el informe se calcula que casi todo el hábitat natural de los orangutanes se verá muy afectado o estará destruido para el año 2030.
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