Chimpancés poseen mayores capacidades de memoria de corto plazo que los humanos
No sólo eso. El chimpancé pudo reconocer la secuencia descendente de nueve números e identificarlos en forma correcta, aún cuando desaparecían de la pantalla antes de que pudiera señalarlos. Tal y como se demuestra en este vídeo.
Ambas sorpresivas evidencias fueron presentadas por el investigador japonés Tetsuro Matsuzawa, del Instituto de Investigación en primates de la U. de Kioto. Esto, en el marco del encuentro anual de la American Asociation for Advancement of Science (AAAS), que reunió hasta ayer a cientos de científicos de distintas áreas que presentaron sus descubrimientos más recientes a la prensa y la comunidad.
"Los chimpancés poseen una memoria a corto plazo extraordinaria, pueden ser mejores que nosotros para enfrentar ciertas tareas cognitivas como memorizar números presentados en una pantalla", dijo Matsuzawa.
Además explicó que una etapa del experimento puso mayor dificultad a la tarea ya que una vez que el animal tocaba con su dedo el primer número de la secuencia se tapaban o enmascaraban todos los siguientes con un cuadrado. Con todo, Ayumu fue capaz de repetir la secuencia sin equivocarse.
En algunos casos, intencionalmente, se presentaron secuencias con números faltantes (1-3-5-6-7-8-9) y aún así logró realizar la indetificación a una velocidad sorprendente.
Algunos números logró memorizarlos en apenas 0.5 segundos. "Nadie puede hacerlo a esta velocidad y precisión", asegura el investigador.
"Los humanos no pueden hacer esta tarea, los chimpancés sí. La explicación es que estos primates son buenos para memorizar muchos objetos, los humanos podemos ver las cosas pero además saber su significado. Los chimpancés viven el aquí y ahora, nosotros vivimos pensando en el pasado, el futuro y tratando de entender el significado de lo que vemos y llevamos nuestra información a otros semejantes para compartir la experiencia", informó el primatólogo japonés.
Es decir, el chimpancé necesita su aquí y ahora porque de eso depende su vida. Por ejemplo, puede memorizar todas las ramas de un árbol apenas las ve porque le serán útiles para desplazarse en lo imediato. Para nosotros sin embargo la utilidad de obtener tanta información no resulta tan relevante.
En en el centro de investigación en Kioto, que recrea las condiciones de la selva africana, viven 14 chimpancés que concurren voluntariamente a los experimentos en el laboratorio, destacó Matsusawa. El primatólogo, quien también trabaja con chimpancés en su ambiente natural en Guinea, África, mostró su trabajo durante el simposio Avances en nuestra comprensión de los aspectos cognitivos y psicopatológicos de los primates.
Durante el mismo encuentro Victoria Wobber, quien trabaja en estudios sobre la capacidad cognitiva de chimpances y bonobos en santuarios de África, destacó que su equipo de investigadores comprobó que estos primates, más los segundos que los primeros, son capaces de trabajar en forma colaborativa. Cuando se dan cuenta que no pueden resolver una tarea por sí solos convocan a otros semejantes y juntos se dedican a buscar una alternativa hasta que lo consiguen.
En tanto, Martin Brüne, psiquiatra del hospital de la universidad Ruhr Bochum, de Alemania, presentó un estudio sobre la psicopatología en los simios y su posible tratamiento.
Según el especialista, los chimpancés presentan no sólo sorprendentes similaridades con los humanos en las funciones sicológicas normales sino también en psicopatologías como el estrés postraumático y el desorden bipolar.
Todas estas semejanzas colocan en un mayor cuestionamiento el uso de chimpancés como modelos para tipos de experimentación que significan estrés para ellos y levanta mayores barreras éticas, reconocieron los investigadores.